El cielo nocturno está plagado de estrellas. Muchas de ellas se encuentran unidas en acumulaciones de cientos o miles de estrellas. Son lo que se conoce como cúmulos estelares. Pero entre todos ellos debemos diferenciar entre dos tipos de cúmulos: los cúmulos abiertos y los cúmulos globulares.
Cúmulos abiertos
Los cúmulos abiertos son agrupaciones de estrellas formados a partir de la misma nebulosa. Este tipo de cúmulos también se conocen como cúmulos galácticos, ya que se pueden encontrar por toda nuestra galaxia.
Su estructura es aleatoria y, en general, asimétrica. Pero las estrellas que los forman sí están ligadas gravitacionalmente entre sí. Normalmente están formados por varios cientos o miles de estrellas, que podemos percibir individualmente a través del telescopio.
M52 o Messier 52 es un cúmulo abierto en la constelación Casiopea, se distingue por su tamaño y brillo, y con estas indicaciones no es difícil de encontrar.
Distancia a la Tierra: 5,000 años luz
Magnitud Aparente (V): 5
Esta belleza está registrada con el número 52 del Catálogo Messier. El Catálogo Messier es una lista de 110 objetos astronómicos confeccionada por el astrónomo francés Charles Messier y publicada originalmente (103 entradas) entre 1774 y 1781.
Cómo encontrar a M52
Comienza por identificar la forma de W de Casiopea y céntrate en sus dos estrellas más brillantes, Alfa y Beta Cassiopeiae. Debido a que esta constelación es circumpolar, recuerda que mirar el lado que tiene las estrellas más brillantes. Ahora, simplemente dibuja una línea mental entre Alfa, la estrella menor, y Beta, la superior, continúa con esa línea en el espacio aproximadamente la misma distancia, y apunta tus binoculares o el buscador.
En los binoculares, M52 se muestra claramente como una nube estelar a punto de resolver y como una mancha nebular en el buscador del telescopio. Incluso el más pequeño de los telescopios puede esperar resolución de esta belleza de varios grados de magnitud y cuanta más abertura se aplica, más estrellas se verán. M52 se adapta bien a los cielos urbanos o con contaminación lumínica y aguanta bien en condiciones con bastante luz de la luna y cielos brumosos. Con un telescopio de 4 pulgadas se muestra como un denso y magnífico cúmulo, rico en estrellas tenues, y descrito frecuentemente como con forma de “V” o de ventilador; la gigante amarilla más brillante se encuentra en el borde suroeste.