La atmósfera terrestre, si bien permite que los humanos y animales respiremos, ésta distorsiona las trayectorias de los rayos de luz que provienen del espacio haciendo que no podamos capturar imágenes completamente nítidas del Universo. La única forma de librarnos de ella es, claro, poniendo el telescopio en el espacio. Ahí no hay atmósfera, entonces no hay distorsión… pero, por otro lado, tampoco es fácil subir un telescopio de varios metros para colectar toda la luz que queramos desde el espacio, es una por otras ¿no creen? El diseño y desarrollo de los telescopios espaciales se ha dado en tiempos relativamente cortos y son una realidad desde hace ya bastantes años.
El Telescopio Espacial Hubble fue puesto en órbita alrededor de la Tierra en 1990, cuando yo terminaba la escuela primaria. Es un telescopio fuera de la atmósfera que, aunque solo cuenta con 2.4 metros de diámetro en su espejo colector, es un verdadero coloso de la astronomía actual, que ha generado un gran avance en la ciencia y enormes descubrimientos. Para decirlo claro y simple, nos ha permitido observar algunos de los sorprendentes detalles de los confines mismos del Universo.
Este 2020, se cumplen 30 años de que ese ansiado sueño se hizo realidad, con el lanzamiento del Hubble en 1990. El Telescopio Espacial Hubble ha sido el instrumento que ha dado paso a una nueva era en la astronomía, es por ello que, en este año, la Noche de las Estrellas te invita a celebrar con nosotros tan grande acontecimiento.
Noche de la Estrellas 2020
El Universo Develado
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